El Ayuntamiento de Peligros se pone del lado de los usuarios y de las usuarias de CaixaBank en sus “legítimas y sensatas” reivindicaciones. Así las ha calificado el alcalde de Peligros, Roberto García, quien especifica que “también estamos del lado de los trabajadores y las trabajadoras de CaixaBank que están sufriendo los recortes de personal y el lógico malestar de la ciudadanía”.
Roberto García se ha dirigido por carta al director territorial de Andalucía Oriental de CaixaBank, para manifestar su preocupación por el descontento que han generado “las medidas derivadas de la fusión entre Bankia y La Caixa” entre los vecinos.
En el municipio de Peligros, la fusión ha resultado en la reducción de tres oficinas (había dos de Bankia y una de La Caixa) a una (CaixaBank, calle Pintor Velázquez), con las consecuencias esperadas, que resume el alcalde: “Generación de interminables colas, en la calle, aguantando el frío, desatención a personas mayores que no se pueden manejar con la aplicación móvil o la web y, en resumen, una desatención que no se merecen las personas usuarias”.
“Más, si tenemos en cuenta que Bankia fue rescatada en 2012 con dinero público, es decir, de todos y todas, con una suma que alcanzó los 24.000 millones de euros”, puntualiza. En ese sentido, el alcalde dirige su reclamación “también al Gobierno central, responsable de garantizar la prestación de un servicio básico a la ciudadanía”.
En la carta remitida al director territorial de zona, Roberto García se acuerda también de los trabajadores de la entidad, “los que menos culpa tienen de la situación pero son los primeros que están sufriendo el descontento y a veces la ira de una población que está harta de sentirse abandonada a su suerte”.
Roberto García recuerda que el Ayuntamiento es la administración más cercana al ciudadano, para quien “el alcalde es la primera autoridad, y por ello acuden a mí en busca de soluciones que no están en mi mano”.
Por todo ello, solicita “medidas urgentes en nuestro municipio a fin de calmar los ánimos, estableciendo algún protocolo de actuación que haga sentir a la población en general que esa entidad se preocupa por ellos”.
